Introducción
¿Tienes una deuda pendiente con Hacienda y han pasado varios años sin que te hayan notificado nada? Entonces esto te interesa. Existe una figura legal poco conocida llamada prescripción tributaria, que puede ayudarte a librarte de ciertos pagos si se cumplen unas condiciones. En este artículo te explicamos qué es, cómo funciona y cuándo puedes acogerte a ella.
¿Qué es la prescripción tributaria?
La prescripción tributaria es el derecho que tiene un contribuyente a dejar sin efecto una deuda con Hacienda si la Administración no ha actuado en un determinado plazo de tiempo. En otras palabras, si Hacienda no reclama una deuda dentro de un periodo establecido por ley, el contribuyente puede alegar que esa deuda ha prescrito.
¿Cuánto tiempo tiene Hacienda para reclamar una deuda?
El plazo general de prescripción es de 4 años, y puede aplicarse a:
- Impuestos como IRPF, IVA, Impuesto de Sociedades, etc.
- Multas tributarias.
- Devoluciones indebidas.
Este plazo empieza a contar desde el día siguiente al que finaliza el periodo voluntario de pago o presentación del impuesto.
Casos en los que se aplica la prescripción
Puedes beneficiarte de esta prescripción si:
- Hacienda no te ha notificado nada sobre esa deuda en los últimos 4 años.
- No has hecho ningún pago parcial o reconocimiento de la deuda.
- No has recibido inspecciones, requerimientos o diligencias relacionadas.
¡Ojo! Cuándo NO se aplica
El reloj de la prescripción se reinicia si:
- Recibes cualquier notificación oficial de Hacienda.
- Realizas un pago, aunque sea parcial.
- Solicitas un fraccionamiento de la deuda.
En estos casos, empieza a contar un nuevo periodo de 4 años desde ese último movimiento.
¿Cómo puedes saber si tu deuda ha prescrito?
Puedes solicitar un certificado de situación tributaria en la sede electrónica de la Agencia Tributaria o acudir a un despacho profesional que valore tu caso.
En Abogados Universia, analizamos la situación de cada cliente para ver si puede acogerse a la prescripción tributaria y ayudamos a presentar la alegación correspondiente.
Conclusión
Si tienes deudas antiguas con Hacienda, no las des por perdidas ni las pagues sin revisar. Podrías estar ante una oportunidad de eliminarlas legalmente. La prescripción tributaria es un recurso poco usado, pero muy efectivo si se aplica correctamente.
Consulta con tu asesoría fiscal o contáctanos en Abogados Universia y te informamos sin compromiso.